domingo, 11 de febrero de 2007

Casa Solla (Xantanza II)



Con el recuerdo aún vivo de la jornada de ayer en Pontevedra y Poio, voy a relatar y ilustrar lo sucedido para dar (sana) envidia a los que no han podido asistir a la II (Blogo)Xantanza. Lo mejor del día fue la compañía (incluyendo la de Pepe Solla), el compartir una comida sublime, realzada por el vino.

Voy a ir a hablar de lo que más me gusta: comer, beber y disfrutar. En recuerdo a Elena Salgado, que esta semana ha estado hablando mucho de vino, voy a titular el relato con los vinos que fueron acompañando la comida.

Fefiñanes 05


Casa Solla: empanada, berberechos al minuto, chupitos de calabaza, micropinchosLa espera, si es breve es buena. Pero con unos aperitivos como los que nos dieron la bienvenida en Solla, aún es mejor. No nos apuramos nada. Miento, nos apuramos a terminar los berberechos antes de que enfriasen. Los berberechos al minuto duraron eso, apenas un minuto. No hace falta que diga que estaban tremendos. Otro hurra debería ir a la empanada. No importa que sea muy obvio servir una empanada en Galicia, porque es un plato fantástico, y fantástica estaba esta empanada. (Con verguenza tengo que admitir que no supe identificar que era el compango). Aunque muy sencillos, merito de ofebre el preparar los pinchos de microtomate con queso.

El Pazo Fefiñanes del 2005 estaba tremendo en el 2007. A mi me trajo recuerdos (a lo mejor la comparación no debería hacerla, porque no tienen nada que ver) de cualquier excelente blanc de blancs de Champagne, por el cuerpo. Perfecto para acompañar los frutos del mar, que vinieron a continuación:

Casa Solla: Gamba al ajillo, setas aliñadas y ostra escabechadaEl ajillo de la gamba era muy sutil como tambien la cocción, plena de sabor de mar. De la montañana, las setas con su carne firme y sabrosa. En cuanto a la ostra, ya se conoce que nunca he sido un apasionado de ellas, pero las Xantanzas me han hecho un converso. Que sabor tan delicioso consigue Pepe con el escabeche (tambien muy comedido, respetando el sabor marino). ¡Chapeau!

Casa Solla: Vieira EncebolladaQue bien le sienta a la vieira un poco de plancha (ni a una camisa italiana le sentaría mejor). Tampoco le hacía mala compañía el consomé (que nos traia recuerdos asiaticos).

Casa Solla: Bogavante en si mismoEl bogavante en si mismo nos dejó ensimismados. Visualmente atractivo, la carne tersa del bogavante, la sopa de si mismo y los fideos finísimos. Y a mi, que no me entusiasma el marisco. Creo que me va a comenzar a gustar el marisco.

As Sortes 2004


El vino cambió para prepararnos a los nuevos sabores que vendrían. Y como queriendo aclarar mi incredulidad sobre la madera, un muy buen vino con una relación breve pero intensa con el roble: As Sortes 2004. Ya estabamos listos para atacar una famosa obra del artista:
Casa Solla: tosta de huevo a baja tempratura con un toque de trufaHabía leido, me había recreado en fotos, y por fin podía probar el huevo. Una textura muy especial, un sabor pleno (yo personalmente agradecí que no llevase mucha trufa). Riquisimo.

Casa Solla: Pampano con caldo de codido¿Pámpano? Tuvimos que preguntarle al cocinero porque la verdad es que ninguno conocíamos el pescado. Como nos explicó era de carne blanca, pero con un cierto sabor de pez de roca. Gran descubrimiento de pescado, muy bien preparado, una delicia. La sorpresa era contraponerlo a la acidez del grelo (a lo mejor demasiado ácido para mi gusto) y el sabor fuerte y rotundo del caldo de cocido (gallego). Que desconcierto, y que idea tan original. De todas formas he de admitir que evité mezclar el pescado con el grelo. No estoy acostumbrado a tomar ni grelos ni nabizas tan ácidos. De hecho pienso que se podría evitar. Eso sí, el pescado me gustó mucho. Y el caldo era un contraste muy llamativo, y no tan estridente como pensaba.

Lalama 2002


Menuda batida la que estabamos dando a todas las posibilidades de vino en Galicia. Ahora, con total atrevimiento, ¡un tinto gallego! Nunca hubiese esperado yo demasiado bueno de un tinto hecho en Galicia, pero... ¡oplá!: el Lalama 2002 es toda una sorpresa. Una sorpresa muy agradable. Un vino con muy buen cuerpo, aterciopelado y nada ácido.

Casa Solla: costilla de cerdo iberico, confitada y doradaEs que el plato se merecía un vino tan peculiar. En una buena enchenta gallega, no podía faltar un poco de churrasco. El churrasco sublimado. Muchas horas estuvo (el cocinero nos reveló el secreto) la carne haciendose al vacío, sin perder sus jugos y volviendose tiernísima. Carne excelente de cerdo iberico. ¡Que gustazo! Y casi me había olvidado, pero el plato estaba acompañado de unos crujientes tirabeques, que redondean la maravilla.


Brunheda 2000


Que alguno de los otros comensales me corrija, pero fue la sorpresa de la comida. Nos dejó a todos engatusado. Ni por la botella, ni por la copa en que la servimos hubiesemos esperado que se tratase de un vino dulce, con múchísimo cuerpo, pero sin ningún sabor licoroso. Siempre me he sentido desconcertado ante que acompañar con los postres, y este vino parece ser perfecto para el cometido: Brunheda Reserva 2000 (Puede que sea este vino u otro de la bodega Brunheda).

Casa Solla: fresas con cocoFresas acompañadas de una suave espuma con aromas a coco. ¡¡Pena de los que no les gusta el coco!!

Casa Solla: como una tarta de manzanaVoy a apropiarme del título de un cuadro famoso: Esto no es una tarta de manzana. Para los apasionados de la manzana (yo lo soy) este postre es un regalo increible.

Casa Solla: Leche, Cacao, Avellanas y salEl nombre perfecto para este plato sería: leche, cacao, avellanas y... ¡...!. Espera, que he adelantado la sorpresa. Porque lo fantástico del platoes que comenzabas a disfrutar, primero el helado de nata (creo que era), luego el praliné de avellanas, y cuando llegabas al fondo, ¡voilà! ...... Un éxito de postre. Mi postre preferido de la comida. (Finalmente he decidido no decir cual es la sorpresa, para que podais daros el mismo gustazo de quedar sorprendidos cuando vayais por Casa Solla).

Casa Solla: milojasQue verguenza, que buen aspecto que tenían las milojas, pero yo al intentar partirlas con el tenedor, las aplasté todas y ya no fue lo mismo. Por mi culpa, por mi culpa....

Casa Solla: craquelin, frutas, trufas y toffeQue gustazo para los golosos, la traca final. El toffe lo que más me gustó.

Ahora para terminar, una alabanza al cocinero. No sólo nos presentó una maravilla de platos, dejandonos estupefactos con sus habilidades. Aparte como he destacado en este comentario, se encargó de sugerir los perfectos maridajes entre el vino y sus platos. Para mi es un detallazo. Siempre que voy a comer me encuentro con el problema de que (aparte de que no se demasiado de vinos) que me siento perdido ante que vino escoger. Ya no es escojer el mejor vino o el peor, si no saber que vino es adecuado. Cuando repites mesa, es más fácil acertar, pero la primera vez estás perdidísimo... Y con el consejo tan bueno de Pepe, sus platos han lucido de manera especial. Y en general, Casa Solla se puede sentir orgulloso del trato que dan a todos sus clientes, hacen que todo sea un placer: la comida, el recibimiento. Muchas gracias por esta maravillosa tarde.

Y tambien encantado estoy de haber podido pasar la tarde con todos los demás participantes de la Xantanza: Fini, Ramom, Catuxa, Manolo, Sole, Alejandro, Isabel, Salomé, Óscar, Miguel, César, Chus, Jorge, Maica, Leandro y Xesús.

La xantanza desde otros puntos de vista:
Cocinalia, Capítulo 0 (bis), Pantagruel, Supongo, De Pinchos, Another Cow in the Corn, Colineta, Gourmet de Provincias (bis), Gueiko.

4 comentarios:

lanusa dijo...

Como te pusiste majetón! q envidia!

Jorge Guitián dijo...

Un lujo por lo que nos sirvieron, por como nos trataron y por poder comaprtir la mesa con tanto blogogastrónomo.

Excelente crónica.

Anónimo dijo...

Ni que decir tiene que fue una jornada gastronómicamente perfecta. Compartir una comida así con gente a la que le apasiona comer, es un lujo. Y la cosa promete continuar... Coincido contigo en que la guinda a la comida fue que el propio Pepe Solla escogió los vinos que pensaba mejor podrían ir con la comida... y evidentemente no se equivocó.

Anónimo dijo...

Artista, aínda non te recuperaches?
Moi ben a túa historia, pero todo o mundo che notou máis alterado ca vez anterior. Serían as malas compañías? XD