miércoles, 9 de enero de 2008

Sorpresillas madrileñas

Creo que no esta mal compartir en la web unas cuantas buenas sorpresas que nos hemos encontrado mientras dábamos vueltas por Madrid. La verdad uno de los grandes placeres de esta ciudad es la cantidad de lugares donde comer bien en cualquier esquina. Y en este caso además todos con un precio muy ajustado (excelente relación calidad precio).

Taberna Doña María Luisa (mapa)

(Calle Alcántara 71, Madrid)
El barrio de Salamanca esta lleno de tabernas andaluzas, pero esta medio escondida y en el límite del barrio merece la pena destacarla. Hace buenos fritos de pescados, tiene buen bacalao y comida casera (yo aún mantengo recuerdos muy gratos de unas malagueñas - sardinillas guardadas un par de días en salazón y luego hechas a la plancha). Y todo a buen precio. De hecho durante la semana tiene el mejor menú del día que haya probado en Madrid a menos de 10€.

Cabo Frío (mapa)

(Calle Corazón de María 39, Madrid)
No las teníamos todas con nosotros cuando entramos a comer en el Cabo Frío. Más que nada porque el local no tiene mucho encanto: parece una cafetería grande más que un restaurante y porque luego lo que nos sugiere la camarera son algo como platos combinados. Aceptamos el reto y quedamos sorprendidos, tomamos picadillo con arroz blanco y congri oriental. Todo estaba impresionante, muy bien hecho. Me gustó mucho el punto crujiente del arroz blanco y a todos la yuca con ajo (que luego no había quien olvidase porque repetía algo). Una buena opción para probar la comida cubana en un lugar nada exótico (que a veces cansa tanto restaurante que parece preocuparse más por la decoración que en la cocina).

El Rincón del Ibérico (mapa)

(Calle Jardines 7, Madrid)
Curioso lugar, que está en pleno centro de Madrid (entre Gran Vía y Sol, vamos más céntrico imposible) pero en una calle que no creo que visite nadie. Ahí escondidillo estaba el Rincón del Ibérico, que con este nombre ya daba que sospechar que estaba especializado en cocina extremeña. De nuestra primera visita nos sorprendieron con unos huevos estrellados con ¡patatas cocidas! (¡que buenos!) y un cochifrito contundente (con bastante ajo, lo que nos debió venir bien para la salud). Y volveremos, porque nos quedamos con las ganas de probar las migas extremeñas. Muy buen punto de avituallamiento si anda un por el centro de compras (eso sí, es muy pequeño, apenas una barra y 4 mesas).

Lo sorprendente del caso es descubrir que no se trataba de un restaurante, si no el local de degustación de El rincón del ibérico (una página web de venta de productos extremeños). Pues se come mucho mejor que en otros sitios que se tienen por restaurantes.