sábado, 16 de junio de 2012

Italia: ¡Avalancha!

Suomo en Liguria (pista: Foccacia, Focacce y Farinata )

Pido disculpas a los que sigais el feed del blog porque ha sido un monotemático de Italia estos últimos días .... Y lo seguirá siendo al menos en 6 o 7 posts más porque tengo mucho material. Es curioso que apenas 4 días enteros hayan dado para tanto culinariamente hablando. Inicialmente, el viaje no tenía ninguna intención gastronómica. Intención explícita, claro está, porque ya en mis visitas anteriores a Italia siempre me llamó la atención la atención que dedican los italianos a lo que comen y lo que beben. Allí algo tan sencillo como una heladería tiene gran calidad y una pizzería  cualquiera de Italia merece mucho la pena.

Antes de recibir protestas no me refiero a lo que pueda encontrar la gente en lugares turísticos y restaurantes para turistas. Estoy seguro que hay mucha comida mediocre en Italia, pero si teneis experiencias malas, reflexionar si tal vez no sea un poco culpa vuestra. Es bastante fácil evitar los sitios malos y dar con lugares decentes. Y desde mi punto de vista (y mi experiencia reciente) en Italia aún más porque la calidad media es alta.

Bueno a lo mejor corrijo un poco, tal vez no sea fácil, pero yo me esforcé un poco a preparar el viaje e investigar restaurantes interesantes (la pena es que la guía web de referencia en Italia,Gambero Rosso es de pago). De todas formas al segundo día ya estaba saltándome cualquier preparativo y guiándome por la intuición. Y a tiento me salió excelente. A ver ¿vosotros teneis esta misma impresión de la buena calidad media de la restauración en Italia? ¿O soy solo yo?

La verdad es que tampoco se demasiado de cocina italiana. Como todos, conzoco tres platos: pasta, pizza y rissotto. Otros tres postres: pannacotta, tiramisú y los helados. Tres embutidos: mortadela, salami y jamón de Parma. Tres vinos: Lambrusco, Prosecco y Chianti. La única diferencia es que soy consciente que la cocina italiana va mucho más allá.

El objetivo de mi viaje era por tanto era ver que daba descubierto más allá de las ideas preconcebidas que todos tenemos.

Y en realidad de manera más simple mis objetivos eran mínimos: tomar una buena polenta en Lombardía y probar el autentico pesto genovese en Liguria, y luego la pequeña locura de atreverme con un gran cocinero como era Massimo Bottura. Y no solo cumplí estos objetivos si no que he tenido multitud de descubrimientos y sorpresas.

Cielos McDonalds, ¿te has pasado a los panninos?

No hay comentarios: