Restaurante A Molinera (Lalín) - 2013

El restaurante A Molinera es un clásico en la ruta de vinos de Lalín. Puede parecer que está un poco escondido, pero no. Está justo enfrente de la Plaza de Abastos. A la derecha de hay un espacio abierto y asfaltado que ahora se usa para varias cosas y que es el recinto de la Antigua Feria. Por tanto, allá por los 80, A Molinera estaba en el meollo de la vida comercial y social de Lalín. No sé cuál es el año en que se abrió el actual local, ni si antiguamente tuvo otro. En los recuerdos más antiguos que tengo de Lalín, creo que siempre ha estado A Molinera allí, y ya tengo bastante más de 30 años.

Conozco el Restaurante A Molinera y he estado en él desde pequeño. Pero nunca me he fijado en su nombre (cuando sabes dónde está un sitio ¿importa como se llama?). Hace un par de años me recomendaron un restaurante de cocina contemporánea en Lalín y me acerqué a ver donde era. Mientras bajé la calle me sorprendí y me alegré mucho: sabía donde era, y conocía el sitio. Por desgracia no he tenido ocasión de visitar el restaurante en años (cuando voy a Lalín no voy de restaurante, voy a comer con la familia).

Finalmente, en invierno del 2012, he cumplido mi deseo.

Información practica sobre el Restaurante

A Molinera es muy polivalente:

Por un lado es un bar, una de los puntos de reunión clásicos de Lalín para tomarse unos vinos o unas cañas. Todos los días hay pincho para acompañar la consumición, y todos los días de feria (creo que son todos los sábados) una legendaria tapa de callos.

Además tambien funciona como restaurante, en una sala que tienen al fondo (y es bastante más grande que lo que aparenta, hay sitio para más de 40 comensales). En cuanto al restaurante propone varias opciones (a todo esto no se si tienen menú del día al mediodía, no lo he preguntado).

• Se pueden hacer cenas y comidas combinando "tapiplatos" según una carta, en la que hay cosas como: Caldo Gallego, Huevo con seta Boletus o Tataki de Atun, Entrecot de Ternera con Encurtidos, ... Crema de Arroz Con Leche, Flan de Queso al Caramelo, Chocolate y Frutos Rojos. (Con precios oscilando entre 3€ de los entrantes, 9€ de los platos más sustanciosos y 6€ de los postres, por ejemplo). Todos estos platos son de enfoque "moderno", y son creaciones de Diego, el hijo de los propietarios.
• Casi todos los días del año (creo que la temporada va desde Octubre a Marzo) hay la opción de tomar un Cocido Gallego completo por 45€ (todo incluido). 
• Otra alternativa es solicitar el menú tradicional (entrante, plato principal de pescado, plato principal de carne y postre) a 35€ 
• Finalmente, sólo con aviso previo, se puede probar un menú especial degustación de 4 entrantes, 2 platos principales y dos postres por 45€ (Este es un menú sorpresa en el que Diego prepara platos que ha creado - alguno de los tapiplatos puede aparecer tambien)
• Y por si no fuera poco, además, se puede comer a la carta, en este caso una carta de platos tradicionales (y no tanto, porque es más bien inglés) como un muy famoso RoastBeef.
• Ah, y todos los lunes domingos PIZZA. La legendaria pizza que hizo famoso al fundador del restaurante en Argentina. 

A Molinera (info)

C/Rosalía de Castro, 15 (esquina con C/Molinera) 

Lalín

Teléfono: +34 986 78 20 55

La cena en imágenes

Algo que es inexcusable para cualquier buen restaurante es tener buen pan. En el caso de A Molinera no les hace falta preparar su propio pan: están en Lalín, el pan es excelente (a ver, mi familia es de Lalín, llevo toda mi vida comiendolo así que no voy a aceptar discusiones al respecto).

Las bebidas que acompañaron nuestra cena: agua mineral (con gas, somos de estos gustos) y Ribeiro Viña de Martín, Os Pasás (blanco)

 Tataki de atún rojo con miso y cítricos

Pulpo a la plancha con crema de puerros y crema de Nabizas

Lubina a la plancha con salsa tártara y encurtidos

 Bacalao confitado, con consomé de mariscos, mejillón, berberechos, almeja y judias verdes

 Mero con boletus y salsa de queso San Simón

 Jarrete de ternera estofado muy lento con puré de castaña y níscalos

 Crema de mango, espuma de limón y frambuesa pulverizada

Chocolate, Crema al Oporto aromatizada con néveda y caramelo

La cena en palabras

En palabras de Polo:

Me gustaría poder hacer una crítica "al uso" e ir desgranando uno a uno los platos, destacar alguno de ellos y quedarme con un momento estrella del menú, pero no puedo: desde el primer momento el menú es excelente, siempre a base de productos de mercado (es inútil pedirle a Diego información sobre los platos del menú con una cierta antelación, porque en gran medida depende de la oferta de ese día en particular) de una excelente calidad.
Y sin embargo, a medida que pasan el tiempo mis recuerdos de la cena se centran menos en la excelente materia prima utilizada y cada vez más en el sabor de las cremas, los consomés y los purés y en el juego de contrastes que proponían en cada uno de los platos. La crema de nabizas, el consomé de marisco o la salsa de queso San Simón eran acompañamientos con un sabor tan intenso, tan inconfundible, que se erigían en protagonistas de un plato del que en teoría eran un mero acompañamiento. Y creo que para conseguir esto hace falta ser un muy buen cocinero.

En palabras de Xose:

Bueno, unha vez dada a información práctica en castelán para que chege a maior xente posible, pois fago a valoración persoal en galego, que é o que me presta. O menú foi moi especial en moitos sentidos. No primeiro foi o toque humano. Diego non queda na cociña se non que establece contacto cos comensais. Detalle a ter en conta. Por outro lado hai tamén a parte orixinal é sorpresiva de que o menú non esté prefixado. Ata o día da cea non sabíamos o que nos tocaría, e de feito, ainda así tampouco tiñamos seguro (sabíamos que ía ser moito peixe). Detalle a ter en conta. Terceiro, comparade o menú e o prezo, é unha cousa tan axustada que merece a pena achegarse a Lalín. Detalle a ter en conta.

Pero o máis importante non son nengunha de estas tres cousas, se non o fantástica que é a cociña de Diego e as cousas que é capaz de facer. O ano pasado tivera ocasión de probar a súa tapa de Cocido, e quedei moi abraiado en coma conseguira concentrar todo o sabor da verdura do cocido en cociña miniatura. E é algo que identifica moito a Diego: por exemplo, o pulpo viña acompañado cunha crema que sabía a nabiza a mil. 

Grandes momentos do menú? Pois o bacallau ca súa crema de marisco e os moluscos... E especialmente por ese sabor intensísimo de mar. Ou o Tataki de bonito, ou ese pulpo e esa crema (a de nabiza especialmente). Eu desfrutei moito, moito, moito a robaliza cos encurtidos (paixón persoal polo encurtido). E non menos dicir que os postres son espectáculares. Calqueira dos dous, pero se cadra hai que destacar esa crema de Oporto aromatizada con nébeda que cultivan na súa propia horta os do restaurante. ¿Onde podedes tomar un postre con nébeda? Pois en poucos sitios. Por poñer un plato que non me entusiasmou moito, pois o xarrete. Non é que estivese mal, pero con tanto nivelazo nos outros platos, pois decepcionoume un pouco. (Nota, tamén isto pode ser un tema persoal, veño de descubrir que gosto cada vez menos da carne moi feita, ainda que esté feita a baixa temperatura). 

Resumo: ¿Recomendado? Recomendadísimo.